La casa Llorens, fundada en 1995 en Onil (Alicante), fabrica muñecas 100% españolas, y se nota: con un diseño muy detallista y con materiales de muy alta calidad, solo hay que ver las ropitas de los muñecos, ha conseguido un producto que enamora nada más verlo.
Las tres bebitas que os presento llegaron a casa el día de Reyes de 2012. Son unas muñequitas mecánicas que, al quitarles el chupete, se ponen a llorar. Tienen diferentes tamaños y son de razas distintas. Su cuerpo es blandito, relleno de fibra, y la cabeza y extremidades son de goma. La negrita, Adriana, mide 37 cms, mientras que la morenita María y la rubia Alice miden sólo 33 cms. Vienen peinadas con unas simpáticas coletas.
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